jueves, 4 de noviembre de 2010

Garabateo tu nombre en el papel, incrusto cada una de las letras que lo componen
Me pregunto el porque de todo esto, arrancándome los motores de la libertad girada al mundo.
Absorbo la información por muy tonta que sea, y no me inmuto, la vitalidad la constituía tu lado tierno, tu lado frustrado, tu lado triste, todos y cada uno de tus lados.
Imagino las cosas que hubieran sucedido si estuvieras aquí, y mañana será exactamente igual.
Los perdones y los acuerdos, los gestos del silencio callados por un curador beso.
Y tus ojos, llorosos iluminados al dar la vuelta al grandioso acierto y profundo error de tu ausencia.
Y ese toque, los que me hacían despertar dormida cada mañana pensando en volver a verlos.
Y el alma, y el corazón , y mis pupilas, y mis pensamientos, atraviesan las cuerdas fijas y desequilibrándose del tiempo surcan
Buscándote por la misma razón
Por ser tú

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