lunes, 17 de octubre de 2011

No me digas que has venido para quedarte, tan sólo, quédate.
No me beses sin más, solo porque lo quiere el corazón
Me agarras cuando perdida me encuentro, eres una señal que me conduce
Que me inspira, que me seduce.
No hay maravilla que sobresalte más en mi parecer que tu mirada. Esa que me dedicas parando los segundos, durmiendo a los minutos, haciendo correr a las horas.
Podré tener a todo el mundo en contra, que cuando eso pase, sabré como huir de ello, como enfrentarme y perder ganando. Tan solo tú. Tú mi nave para atravesar cualquier obstáculo con o sin maldad.
No olvides, que seré fuerte cuando no estás, para que al regresar tras días, te abrace, te susurre lo mucho que te he echado de menos y ganes parte de mi felicidad.


Sí, sí. Soy yo. Esa chica que una vez conociste y nunca se quiso enamorar.
Pero que la razón, durmió despertando al corazón. Y en ese momento, estabas aquí.
Haciéndome mujer cada día, rogándote como una niña
Sé que todo es rápido, que lo que creemos lento con la misma se va
Aunque, tu cuerpo ha de aferrarse a mi piel, y ser uno. Uno cuando las cosas vallan mal, cuando llegue la armonía, cuando lo necesitemos, cuando con o sin necesidad, la vida nos haga caminar.
Sé que nos queda mucho por vivir, sé que muchas cosas pasarán, pero circunstancia tras circunstancia, yo ¿contigo? mi vida quiero pasar.
Protege este alma confusa de sociedad, que aunque me intenten derribar, yo me agarraré al corazón y la esperanza.
No importan los miles de motivos que den los diferentes destinos...yo quiero ser el tuyo, quiero que seas el mío.
Tras el dolor, tras los ruegos, poderse uno encontrar.
Y sino, saber que tengo la estrella de este universo, yo y, tú.
Esa que nunca se va a apagar, que me encargaré de que, en tus dolores de cabeza, te calme el corazón.
Te abrace por detrás y de un beso, hacerte los males olvidar
Puede que, esté enamorada. Solo mírame a los ojos cuando te recito mi amor, ¿lo notas?
Todo de mí, todo cuanto dejo atrás, lo hago para demostrar.
No hay mayor reto que revivir de caídas, y mi alma tiene una propia, la tuya abrazar

No hay comentarios:

Publicar un comentario