Y dice no.
Se niega, se niega a compadecerse
A que se compadezcan.
Lo afirma, sabe vivir con o sin su compañía
No necesita nadie para ilusionarse en sueños, para creer en el amor y en la amistad
La compasión solo marchita los corazones. Los llena de penurias que un día, les harán llorar
Seguir hacia delante es el último paso de la liberación
De desencadenar la prisionera culpa que sin tener dueño, ya sirve.
Continuar, continuar y continuar
Y, alguna mañana, no recordarás lo que hubieras recordado, no necesitarás superar
Porque ya lo habrás echo, ya habrás sacado toda tu penuria de tu alma y de tus ansias de ver, soñar, amar y experimentar.