Sonrisa cálida, aura de paz
Manos suaves, respiración en calma
Así te imaginé, así te soñé
Estabas ahí, escuchándome, con la mirada en algún lugar
Con aquel gesto que solías repetir cuando te volvías pensativo
Los labios fruncidos y, te acariciabas la oreja
Sin articular palabra, y sin saber que decir, te desvaneciste
Pues en la realidad nada ha pasado, no pasó
Pese a que la paciencia es una virtud que pocos consiguen controlar, la domo fuertemente
Tú vales la pena y el corazón me lo recuerda una y otra vez
Otra noche más en mis sueños te has vuelto a colar
Trasmitiendo una felicidad absoluta cuando cierro los ojos
Solamente flotando en el cielo soy capaz de ver a ese ángel que una vez, bajó a la tierra por mí
Perdóname, aún habiéndolo dicho con la cabeza en algún lugar de la imaginación, perdóname
Estás presente aquí, 
tu ausencia me abraza mientras volviéndome a sentar, añoro verte a mi vida llegar
Porque lo harás, ¿verdad?
Si tú supieras, si supieras lo que haría por hacerte feliz