domingo, 14 de agosto de 2011


Al nacer, supones que el exterior es extraño, que los llantos son melodías de una nueva vida.
Al paso de los años, las cosas se transforman, los amores se equivocan, las amistades se rompen y se unen en un para siempre.
Nunca es tarde para equivocarse, enamorarse y descubrirse.
Tus primeros momentos serán campanas de alegría en inocencia
A medida que pasa el tiempo, te preguntas el por qué de los instantes donde las consecuencias desaparecen, te preguntas el verdadero sentido del vivir y sobretodo, del qué sería sin ti.
La etapa más dura, sabrás que ha llegado cuando los dolores de estómago sean por personas que al recordarlas, duele.
Que los dolores de cabeza sean los gritos de tu madre o de dos pasiones unidas al amor.
Cuando los nervios te acompañen por una nota en un papel, al ver al chico por el cual has dormido con una última sonrisa despidiendo a la noche.
En la vida, tú seguirás un cause con miles de rostros y pocos fijos.
Y las manos que te agarren, serán esas por las cuales tú eres quien quieres ser.
A lo largo de los años, verás como tu ayer era tan bello cuando lo aborreciste.
Verás tu presente como un navío sin rumbo y, el futuro como un desafío.
A los 16 ese día que lo cumples, da igual cuando fuese, pero esa edad al azar...verás las flores que te cayeron a la espalda, las puñaladas consecuentes de lágrimas y los amores idos con uno solo acompasado al corazón.
Si hoy lloras, mañana encontrarás un motivo para reír.
Si hoy ríes, mañana serás feliz
Si hoy no sabes nada, mañana otro camino vendrá
Vive con un egoísmo sano, vive como tú realmente eres feliz.
16. Una es la vida, seis las veces que el clima te hará meditar, disfrutar y amar.
Amanecer, un comienzo
Sol cálido al mediodía para olvidar lo que en una noche te liaste
Atardecer para despedir lo que se hospeda
Noche para llamar la atención a tu dirección
Madrugada para cerrar los ojos y, soñar

No hay comentarios:

Publicar un comentario