Como explicarle al mundo lo fácil que es subir una cima sabiendo que vas a caer
Como deletrear la palabra seguridad sin tenerla entre los ojos.
Como amar si ni siquiera te atreves a lanzar una parte de ti.
Cuando sientas con certeza que has perdido ese sentimiento del cual ahora pudres.
Planta la semilla de una nueva flor, diferente a la antigua, con la misma fluidez por la cual se tuvo que callar.
Todos vamos a ser uno individualmente cuando más lo necesitemos.
Cría el nido por el que vale la pena triunfar, un nosotros tenaz e imperfecto, de esa imperfección que te haga sonreír.
Que te haga brillar en lo más oscuro del callejón.

La lucha quiebra tu propia voz.
Llegó el momento de tirar la moneda al riachuelo, con esfuerzo y sonrisas enmendar el camino.
Palabras que van, besos que vienen.
Pasiones que surgen, amores que te cautivan.
Y ante todo eso, se sienta y saluda con la mano.
¿Para? Nada, solamente tiene una idea muy clara.
Él merece ser amado, ella merece ser amada.

Ese brillo propio de una mujer que llora, es solamente la cobardía de un grito que la calla.
De un golpe tosco a la pared echa cara.
Y ese brillo del iris es la belleza que el valor no deja apagar.
Que la conduce por caminos frágiles para así, luchar derrumbando la dureza y mantener la mirada al frente.
Emoción en mirada, sentimiento en la piel.

Una sola gota, una frágil.
Un segundo, un entreabrir de ojos.
Una mirada en ella, en esos instantes de hermosura al caer.
Ligera se desvanece en el aire.
Tus ojos la ven transparente como el alma, la ven desaparecer como el amor y el dolor.
La ven tan natural, como la personalidad que guardamos y no estamos dispuestos a dejar salir.
Gota del rocío, incoherentes miradores.
Belleza inmediata, esquivos de la razón.

Y vuela
Sopla el viento sureste, su pelo a la dirección contraria y sus brazos al destino.
Le esperan en casa viendo la televisión, le espera un ramo de flores en el portal y alguien a quien echar de menos en su habitación.
Pero, no va a volver.
Caen lamentos, ignorancias, todo a cabezas que habitan  el suelo.
Sus pies no tienen límites, descalzos con cosquillas debido a la presión.
Nubes entre los párpados.
Y todos aquellos recuerdos, y todas aquellas personas para bien o para mal, se pierden en la inmensidad del mundo.
La libertad es limitada
Limitada para quien no quiera verla de manera correcta.
Si te rompen las alas, no compres otras nuevas.
Haz como ella, vuelve a volar sabiendo que hasta un tiempo, no superarás las fronteras de los demás.
Y aun así, volverás a volar como nunca hiciste, como desconoces y de la manera más sorprendente.
De esa manera que te revuelve el estómago, te dan sentimientos renovados y caras mudas.
Allá, procura como ella, vivir a lo grande entre lo pequeño.
Entre lo especial de lo indiferente 
Entre el amor que no has descubierto hasta ese entonces.
Entre, ese lugar al que no querías ir y al que ahora no soltarías por la felicidad natural de tu sonrisa.

Quisiera ser el martillo que rompe tu pared, ese que derrumba las alucinaciones y te hace ver.
Si pudiera callar las penas, besaría esa ropa que dejaste olvidada en mi armario, pero, eso no sería continuar.
Camino sin cerrar los ojos para esquivar tu imagen.
Reservo mis dotes, mis dolores, mis fantasías, para ese quien las quiera escuchar.
Y es que, cada día que hablo sin parar, que escuchan mi voz, tú en mi corazón huyes con el viento.
Para una mañana, hacer la cama y caminar entreabriendo las pestañas y ver tu silueta borrosa .
Tu indecisión apagada como el humo y ese amor  con ilusión  por marchar a una nueva frontera.

Sus ojos son los matorrales ocultos de los árboles.
El agua son las salidas de sus párpados.
Un riachuelo cae del alma puesta que ha de regalar.
Sin más, sale a recapacitar la cinta de la película que grabaron una vez.
Vuelve a fijarse en las tomas falsas, en su cabellera abundante contra su seno.
Sus versos entre labios.
La paz que entrañaba hasta a la dureza.
Y en este instante con las rodillas fijadas en la arena, al horizonte le pregunta lo que su aroma responde.

Él era una promesa, era lo infinito ante lo temporal

Era la roca contra la ola.

Era el amor de un corazón.

Si a todo le llega la calma
Si un paso fuerte tropieza
Si una vela se apaga con una lágrima.
Nada será mas certero que un amor que llega, se encariña, y ama hasta olvidar.

Eres dura, eres coraje sin piedad por momentos.
Derrumbas los ojos una milésima.
Aprietas los puños de ahora en adelante, ahora tienes un motivo para caminar a pesar de las caídas.
Todo cambiará, las promesas de esas personas perfectas algún momento desaparecerán.
Quien creías fiel a tus pasos, darán la vuelta.
Y esa persona que era tu propio sol, pocos lo van a  sostener.
Vas a confiar tantas veces, llorarás con razones.
Pocos pero necesarios te secarán las lágrimas, serán de verdad.
Los sueños que has tenido, se borrarán de la carretera.
Y esa ruta, la ocupará otra confidente que le venga a la cabeza.

Ha ocurrido.
Un enlace prematuro ha surgido, sin ti.
Dicen que tu sombra se esfumó, que con otra identidad te identificas.
Que ya no besas igual, que tu manera de actuar es contraria a la que me enseñabas.
La indiferencia de mi corazón se corta con un acto inesperado que acarician tu aire.
Agachaste la pena y proclamaste la rebeldía de lo incorrecto. 
De lo joven.
Parece que la historia se hundió, que de las tinieblas se hizo dueña. Y tú, respondes a la corriente revuelta que depara mi espalda.
No hay nadie en la estación esperando el vagón.
Pero sabemos, que en aquel pequeño banco, siguen los sentimientos a flor de piel y esas palabras con pintura de lágrimas e ilusiones. 
"Tú y yo"

Y todo ha cambiado.
El cariño, abre paso al adiós, al mundo desconocido donde no puedes entrar.
Eres consciente de que eres ironía hasta en la forma de amar.
Dudas en que te amen, en que otras manos te acaricien, en que otros besos sean sinceros cargados de amor.
En que otra figura diferente no te dé lo que te dio él.

Cuando enredó sus brazos sobre tu pelo, cuando tocó tus labios, lo demás se paralizó.
Sus pasos dejaron huellas en lo más hondo de tu pecho, el amor coloreó tus ojos.
Una historia, otra próxima, y otra.
Con ese protagonista desapareciendo y viniendo.
Te preguntas el motivo del por qué te hacen perfecta en una sábana y te ignoran por la calle.
Lloras por sus gestos de confianza perdida en el viento.
Por un amor que es un sobrenombre.
El real: pasajero, temporal, pasión.
El único que dominó zarpó de tu isla. Hasta que, una barcaza llena de tesoros que creíste posados en la arena del fondo del mar, acarician tus manos.
Si la corriente se lleva el mérito. 
Te devolverán algo mayor hacia tu espalda.
Invisible para los ojos, disimulando entrar y hacer hueco en tu corazón.

Parado en la frontera del amarte para satisfacer a la nada, suspiro.
Encuentro consuelo en tu sonrisa pasada. 
En tus manos contra mi piel.
En aquellas palabras al oído sin pensar en el después.
Ahora estoy siendo fuerte, ignorando lo débil que acabé en poco tiempo.
No puedo asegurar que certeza exacta voy a cumplir, solo sé que recorro tramos para volver a ser feliz.
Si el amor es como el sol, que amanece de manera maravillosa, que cae de manera melancólica.
Yo soy la sombra perdida del mar, el oleaje revuelto y la templanza de sus ondas.
Mañana despertaré con esas dudas que callaste sin prejuicios.
Pasado, las cerraré en mis labios.
Me ocuparé de caminar en terreno nuevo, en ese donde soy un desconocido, en ese, donde estoy lejos y puedas echarme de menos.

Y entonces le miras.
Sabes de la inocencia de su mirada, conoces algo de esa sonrisa.
Completas una parte vacía que no sabe devolver.
Recapacitas y te dices que este es tu momento, que aunque no te gusta esto, quizás es por el comienzo de algo maravilloso.
Entiendes que lo lento se hace esperar,  que tu impaciencia la has de competir.
No razonarás sobre ello, solo vivirás del aire libre, de lo bueno y lo malo de las personas, de un cambio sobre ti.
Nadie cambiará cuando llegue la hora, todos se adelantaron o tú te atrasaste sea el motivo que sea.
Un gran principio será, cuando no sepas volver a ser lo de antes, cuando reconozcas el camino hacia lo desconocido, cuando esa incomodidad que te hace fuerte te domine. Cuando de verdad estés madurando siendo tú.
Con algún proceso nuevo, con alguna fortaleza que hace que tus creencias de defectos en ti, son más que encantos o respetos para las personas.

Posas tus ojos a la sombra del sol
Miras las olas rebotar con la dureza del viento, con las rocas puestas en el suelo de la mar.
Alzas tu cabeza tan calmada como liberada
Un dedo toca la piel del atardecer, lo hueles, lo sientes, lo fotografías.
Pero sabes, que las penas que ya se fueron las vuelves a tirar allí, en un hueco entre la preciosidad.
Entre el adiós del sol.
Tras tu sonrisa, tras tus ojos claros a la luz.
Con la palma de la mano abierta y cansada de luchar, de ir consiguiendo la victoria.
Como llegaste a imaginar la última vez que pisaste ese sitio donde has pasado de largo.
Sin quejas, sin presión, con el abandono de lo que fuiste para el masoquismo.

Que bendito son los claros sobre tus mejillas, tus brazos sobre tus piernas.

Tu corazón sin nada que decir

Es mágico, su mirada sobre la mía, la importancia de un beso tras una sonrisa
Sus pestañas acariciando mi nariz.
Sus brazos sobre mi cintura
Una risa en mi oído, entre lenguas
El mundo había caído de una muralla muy alta, lo vi perdido por un instante.
Lo reanimé, apareció un ayudante disimulado que cicatriza sus heridas.
Que le enseña a quererle, completando así su corazón.
¿Amor? debe ser, un solo toque de sus manos, de sus labios, de su piel, enloquece ese nervio sque creía perdido. Esa pasión dormida que finalizó en su día.
Y que ahora, inevitablemente despierta, de manera encantadora.
Con esa sutileza, de enamorarse nuevamente.

No siempre recordaremos que fuimos.
Quienes acompañaban nuestras tardes y a quien supimos amar tarde o temprano.
Solo una certeza afirma la regla de esta vida que todo lo da y todo lo quita.
Evolucionaremos como personas cuando verdaderamente al caer la tarde caigas tú para amanecer como una ola provocada por una erupción del mar.
Cuando sepamos como la injusticia provocó al destino y diste un paso incierto.
Como renaciste en tus cenizas sin quemarte.

Y sin más sale a pasear
La sucumbe la lluvia que traspasa el mar
La engañan a la primera que vuelva a respirar
Ama la vida en sus cuentos convertidos en realidad.


Son alegres sus risas
Son tristes sus pestañas
Deja a la respiración perpleja con tan solo un soplo de brisa
Sus palabras se gravan a fuego en mi tiempo que eran telarañas.
Ya nada lo va a frenar
Alguien  desató tu deseo desde que le comenzó a mirar.
¿Y quién es justo en las palabras que son castigo en su alma?
Ni siquiera el destino se presentó, solo desordenó su cama.
Comienza la estación de los cambios, de las mariposas de primavera en invierno y de labios que besar.
Realiza ese escrito en su piel, con manos inocentes, inexpertas con la sutileza al empezar.
Amor, bendita atracción.

La ceguedad con la que vivió, taponó una posibilidad de ver la vida de la misma manera pero lejos de donde sale.
Es posible que una aventura interpretada en amor fue el engaño de que no continuara animándolo a impulsarse.
Ya no puede negar la realidad con la que ha de convivir.
Con la que, asimila y endurece para no llorar.
Como todo en esta vida, de alguien te vas a enamorar y de alguien creerás que será eterno.
Pero la eternidad es un desafío, y a veces la valentía de ello te pierde por completo.
Y si te pierdes ni la más sincera oportunidad de querer acariciará tus labios ni te agarrará la mano.
Andar con pies de plomo es una opción que se te pasa por la cabeza, ignorar lo sentido lo preferimos en la oscuridad de la noche, pero, nunca llegamos a concienciarnos en todo el alrededor que te a visto morir y reír de otra manera.
Y cuando uno se da cuenta, del plomazo y del dolor de cabeza, renace de sus cenizas que colgaba.
Busca una libertad con salida, una efectiva y una con ese camino de piedras que ha de crear.
Detrás de cada enlace con las personas, un defecto, una mentira, un amor... estropeará lo que se construye con ímpetu.
Con ese rompimiento, nacemos de nuevo con más experiencia. Quedarse en la parada solo será ver autobuses sin espacio para ti.
Es duro asumir lo que está escrito, es duro amar al pasado y es duro comenzar a querer. 
Y al probar, te parecerá suave, sin el mismo entusiasmo, aunque claro, el tiempo hace de las suyas y sin darte cuenta borra tu filosofía y la transforma en recuerdos desde el día que volviste a abrir los ojos.
De la vez que te diste cuenta sin sentir ese abatimiento en el alma.
De la vez que olvidaste esos tormentos y no les diste importancia. 
Todo se consigue no con el tiempo, sino retándolo estando junto a él.

Cólera

Qué pasa
¿Qué jode que digan las verdades a la cara?
Pues se hace
La gente siempre jurándote cosas, diciendo que te quiere, que te aman y están lejos, que todo cambia de un día para otro. Que te subestimen por guardar silencio....
Pues...se acabó
Quizás una persona puede sobrepasar su límite y cometer locuras.
Pero...¿de qué sirve si aquellas que cometes son lejanas y olvidables a la mañana siguiente?
¿De verdad...el mundo es tan falso?
Si es así, si alguien sincero me da la respuesta tras un par de risas y ayudas tras problemas, bienvenido al mundo cruel y amado por su forma de actuar.
Cierto que toda persona es diferente a otra
Pero...también existe la certeza, para aquellos que lo hallan experimentado o descubierto, de que todos tenemos una característica en común.
Si actuamos de la manera en la que actuamos, es por puro pacer, por la pereza del humano y no del volver a intentar salir a la luz en esta vida.
Que en esta vida, somos los descubridores del mundo, no de la miseria como actualmente hacemos. Joda a quien le joda. Si nadie actúa, si pocos lo hacen,tendrán a regañadientes que observar los brazos cerrados de la gente, del egoísmo propio y de las mentiras echas verdades que se crea la multitud en la cabeza
Pero también,ganarán algo que nadie tiene, ser y no fingir.
¿Coraje? muchos dicen, pocos se enfrentan a lo que son dificultades de vital importancia.
¿Pensar de esta manera?
Sí, te trae enemigos ignorantes de cualquier circunstancia.
Aunque, te trae aliados de donde nunca has imaginado.
Pensar, actuar, de manera correcta, no para el ciudadano sino para asombrar a los ciegos sin la enfermedad...¿cuántos?
Venga, dejemos o deja esa copia y aprende a amar a la vida y a la manera de sufrir para aprender en otro intento.
A ser persona y no presumir de serlo mediante mentiras inconexas.

Si al llorar temes perder todo lo que has ganado,llámame.
Si al cantar una voz tosca interrumpe tus temas porque ha salido de tu corazón, acaríciame.
Si extrañas lo que ya no van a añorar, vete conmigo.
Solo soy una pieza de cemento en tu bloque difuso, uno que con el tiempo si se tambalea, lo pierde todo.
Te derrumbas entera. Por la sencilla razón de que el amor mudo, es el más bruto al hablar cuando se va.

Cuando tus ojos se posen entre esas líneas perdidas.
Entre cada letra cargada de cualquier sentimiento a favor del amor.
Conserva la sonrisa que tanto tonteó con la mía.
El amor no siempre va a triunfar, porque perderá de nuevo.
Hasta que llegue a la estación donde le bajen por la fuerza y le hagan comprender que allí, en su destino, alguien vigila su aposento porque lo está amando como no se puede dejar de proclamar.

Fíjate en la inmensidad del alma tras el aire fresco y salado de la orilla del mar.
Observa la belleza que consta en el amor que se tiene, no en los ojos que reflejan.
La vida es maravillosa, defectuosa, un intermedio del dolor acompasado del cariño.
El pensamiento del ser humano es totalmente rebelde, incompresible para la misma locura.
Sin vacilar damos pasos hacia delante disimulando que todo va bien, que hemos olvidado lo que seguramente hubiera sido para siempre.
Aunque el mismo hombre, sabe lo que palpita en su constancia con tan solo un segundo en  que se lo repitan, en que lo susurren, en donde se lo digan con seguridad.
Ya nadie ni nada ha de ponerle frenos a lo que desees huir.
Solo basta, la misma conciencia para asimilar o seguir ignorando lo que nos ha marcado en un destino

A veces somos incapaces de asumir que el mundo ya no es nuestro.
Que todo tiene un motivo concreto y nos cegamos en perseguir lo que está fuera de control, de un error
En las adorables esperanzas que te ayudan a seguir cerrando los ojos.
Pero, ni siquiera nosotros mismos somos capaces de intentar ayudarnos con verdades tras un soplo del gélido viento. De agua helada.
Las palabras son el compás del viento, finalizadas, se van hacia otra parte.
Las demostraciones se fijan en el alma, como una dura roca, posible de partir a la mitad, incapaces de tirarla lejos, a la frontera del mar.

Y es que, cuanto más miedo tengo más me miras sonriendo.
Y es que, cuanto más te pienso más besas mis labios.
Y es que, cuanto más te quiero más me correspondes tú.
Abrazas mi alma con un toque de tus dedos sobre los míos.
Haces que olvide lo real para convertirlo en fantasía de mi mente.
Completas el vacío que me quedó en mis noches de silencio.
Debo relajar mis ilusiones por temores que pueden dejar de ser ficticios, pero, si de algo he de asegurarme, es que las palabras han de transformarse en amor , los cariños en ternura y lo nuestro en algo precioso con una simple carcajada.
Descubrir la otra cara iluminada de un romance.

Es impredecible, la vida te cambia totalmente en menos de una milésima.
No puedes echar el freno sin quejas, como un coche a toda velocidad.
Añoras amar como amas ahora, el por qué no sucedió en aquel instante donde todo era insignificante y ahora es lo más especial y perdido que abordas.
Sin duda, el ser humano se pone a prueba con cada movimiento, sea cual sea, unos caerán por él, otros ganarán.
Y tú...tú estarás en la cuerda floja de la indecisión hasta que algo te lo aclare todo y sepas disfrutar de la victoria o tropezar con el fallo.
Humanos, amores,vida misma.

" Recuerdo aquel típico día que te conocí con tu típica sonrisa de par en par entre los labios.
Nunca llegué verdaderamente a interesarme por tu nombre hasta que me lo susurraste por el oído como una canción de amor.
También solía mirar como caminabas, parecías tan inocente y cordial.
Jamás aseguré que me enamoraría de ti, te veía demasiado frágil por si un día me iba como de costumbre.
Pero las cartas de mis manos volaron y de un beso las patas de la mesa se pusieron del revés.
El jugador tiró los dados y decidiste hacer trampas para que el resultado fuese temporal cegando mis ojos.
Ahora sigo paseando por la misma avenida donde me abrazabas con frío, con calor o con las palabras de amor y el aliento en mi cuello.
Una vez señalaste al cielo de una manera patética y encantadora para mí, me dijiste que te ilusionaste con un romance nada más verme y que como unos niños salidos de un cuento fue vernos y enamorarnos. Ahí supe que los nervios que colapsan la cabeza lo manda el corazón, el mío latiendo por ti.
Así fue sucesivamente, día tras día, en mi casa al levantarnos y al acostarnos, en el parque en frente del lago y mis gafas de sol sobre tu cabello, en la playa recorriendo las olas con tus labios sabor a sal, con el teléfono encendido en todo momento y con promesas en mi cerebro que deparaban todo lo que hacía.
Hasta que en aquel instante, te quitaste la careta y regresaste a la orilla de donde naufragaste con una barcaza y un sitio vacío, conmigo en la arena aguantando las lágrimas y viendo como partías sin opción e un ramo de rosas decaído por la ventolera.
Esa tarde aprendí a reír con una penuria vital, con un castigo mandado por Dios.
Esa tarde conocí la cara oculta del amor, de esa que tanto veía y temía sentir, de la que me aventuré por ella y no me arrepentí.
Será que todos tenemos a alguien para uno, para quererle,colapsar el tiempo con su llegada, olvidando lo triste y lo bonito de los demás y sin importar nada, tirar las frases que decíamos antes de vivir lo que vivimos.
Igual que al emigrar, migraremos a otras sábanas y cuerpos donde nada será lo mismo, donde olvidaremos en una noche y amaremos el pasado en dos.
Hasta que echen los frenos sin importar lo que opine tu corazón y cierren en banda tus sentidos hasta volver a renacer de las cenizas que quebramos alguna vez.
Hasta que ciertamente nos demos cuenta que cambiamos por las personas,por dejarnos llevar y asumiendo que es inevitable.
En un mundo de débiles, hasta el más fuerte tienta a serlo."

Terminando el cigarro, apaga sus pensamientos y aspira el olor de la almohada.
Soñoliento de hambre de sensaciones, esquivando las penurias dejadas atrás.

Como un marinero que sale a navegar a mar abierto
Encuentra tesoros en el abismo que recoge y se le escapan antes de salir a la superficie.
No puede sumergirse de nuevo, la presión colapsa las oportunidades.
Pero como marinero que es, ambicioso desde nacimiento, buscará otra salida para llegar a él.
Cavará esas tierras llenas de rocas para encontrar la señal que le lleve a su destino.
Quizás no sea ese que tenía la certeza de que sería suyo, que la fortuna acariciaría su corazón y los triunfos lloverían sobre sus hombros.
Pero será ese motivo de creer en la vida realmente tras fallar en un intento. 
En un corte de respiración.

Pienso que el decir te quiero debe ser especial.
Debe ser una manera en la cual te miran a los ojos y se puede ver expresado.
Que lo susurran y lo gritan de manera tierna.
Que detrás de el va un beso de amor, un abrazo de amistad o una simple sonrisa que lo dice todo.
Pienso que decir te quiero lo malentienden con emociones fugaces.
Un te quiero debe hospedar más de media vida hacia la persona dirigida.
Es un sentimiento que las palabras dejan cortas.
Pienso, que decir te quiero es un paso a decir te amo.
A sentirlo con ímpetu o énfasis, y sea cual sea la manera, que lo sientas de verdad.